Desarrolladora: SCE Cambridge Studio // Distribuidora: Sony Computer Entertainment // Lanzamiento: Agosto 2004 // Plataforma: Play Station 2 // Género: Shooter // Vista: Tercera persona.
Durante mi infancia, pasaron por mis manos varios formatos con los que jugar videojuegos. Empezando por el mítico Spectrum +128k (de un amigo de mi tío), el Amstrad CPC-646 (de la vecina), las recreativas de los bares en los alrededores de mi casa… hasta que tuve mi primera videoconsola: Una Game Boy (de las originales, que eso no cabía en bolsillo alguno), que me regalaron mis padres para reyes, y de la que guardo muy buenos recuerdos.
Mucho más tarde, durante mis años de estudiante en Barcelona y ahorrando mes a mes de mi primer curro… conseguí la primera consola que compraría por mis propios medios: la PS2. Quien ha vivido esta experiencia, especialmente de joven, sabe bien qué es eso. ¡Videojuegos y consolas comprados con el sudor de tu frente!, se aprecia el doble y la sensación es indescriptible.
Corrí hasta el piso de alquiler dónde vivía en aquellos entonces, y con las manos temblorosas, conecté la consola al televisor de segunda mano, introduje el juego que venía de regalo, y por primera vez en mi vida escuché estas palabras:
“Hay miles de historias de fantasmas.
Relatos de sufrimiento, pérdida, y rechazo.
Unas pocas, tienen que ver con los vivos”.
Tras una cinemática que en aquel momento me pareció lo máximo de lo máximo, junto con el salto que di cuando el mando tembló de repente, empecé a jugar a este Ghost Hunter, cuya trama es tal y como sigue.
Cae la noche sobre la gran ciudad.
Todo está en silencio en el Instituto Montsaye, el cual lleva años cerrado.
Enfrente de su puerta aparca un coche patrulla. Del vehículo bajan dos detectives de la policía de Detroit: el joven e impaciente Lazarus Jones, para el cual este es su primer día en su nuevo destino, y su nueva compañera Anne Steele, que lleva más tiempo en la comisaría.
Ambos oficiales miran el edificio, el cual ofrece un aspecto de abandono y decrepitud más que lamentable. No hay rastro de haber ocurrido ninguna emergencia, las puertas están firmemente cerradas, y en su interior todo está oscuro. Jones pregunta qué demonios podría haber ocurrido en este lugar como para que dos detectives lo inspeccionen, y una agotada Steele responde que varios vecinos han denunciado ruidos extraños en el lugar.
Además, la veterana policía explica a nuestro protagonista que el instituto Montsaye no es lo que parece a simple vista. Su cierre fue debido al gran escándalo que se montó hace tiempo cuando un profesor asesinó a diez alumnos a sangre fría durante una representación, tras lo cual desapareció sin dejar rastro. Más escalofriante es todavía el hecho de que la autopsia no pudo aclarar como murieron exactamente las víctimas.
Sin terminar de creer si eso es cierto o si es el preludio de una broma pesada, Jones decide investigar el sótano del colegio, mientras Steele se queda inspeccionando la planta baja.
Mas temprano de lo que uno podría pensar, el protagonista empieza a lamentar esta decisión.
Mientras baja los carcomidos escalones, escucha todo de voces misteriosas y susurrantes que parecen llamarle desde lo más profundo del edificio.
Soltadnos.
Liberadnos.
Con cada paso es como si su mente se colapsara, los susurros son cada vez más nítidos, entonando una letanía irresistible, hipnótica. Jones sigue las voces hasta llegar a una extraña cámara circular con estrafalarias máquinas llenas de polvo. De hecho, todo el cuarto es un gran aparato conectado a varias pantallas, tuberías, cables, y montones de artefactos, entre los que destaca un gran botón rojo.
Sin apenas ser consciente de lo que hace, mareado por misteriosos susurros, Jones lo pulsa.
Una estridente alarma le saca de su letargo. Una luz roja parpadea por todo el lugar, y antes de desmayarse, Jones contempla toda una serie de criaturas incorpóreas de aspecto pavoroso que le atraviesan constantemente, hasta que una mujer de aspecto vaporoso se funde en su mirada, causando que el detective pierda la consciencia.
Al despertar, se encuentra con toda una serie de seres de pesadilla invadiendo el lugar, almas atormentadas llenas de ira que ahora son libres para causar el caos. Por fortuna, cuenta con la ayuda de un aliado de lo más inesperado, el ordenador de El profesor que supuestamente causó los asesinatos. La inteligencia artificial de este computador se muestra decidida a guiar a Lazarus acerca del modo en que puede reparar el daño que ha hecho, para lo cual deberá aprender a manejar las herramientas adecuadas de un cazador de fantasmas.
Desgraciadamente, el ente paranormal que parece liderar a todos estos maliciosos espíritus, un aristócrata del siglo XIII llamado sir William Hawksomre, secuestra a Steele como parte de un complot temible que podría desencadenar un gran peligro sobre la humanidad.
Y aquí empieza la aventura. El jugador toma el control de Lazarus Jones, el cual deberá descubrir el misterio acerca de la máquina, la relación que tiene todo esto con el Profesor, e intentar detener a Hawksmore antes de que sea demasiado tarde para su compañera. Por cierto, ¿Quién es esta extraña mujer fantasma que parece haberse fusionado con el pobre Lazarus?
Durante su periplo, el protagonista visitará emplazamientos tan dispares como un herrumbroso barco aliado de la Segunda Guerra Mundial que sigue en alta mar después de tanto tiempo, una vieja mansión en un pantano, un pueblo desierto medio inundado, y una prisión abandonada, entre otros tétricos lugares, para poder cumplir sus propósitos y conservar su alma intacta.
Y hasta aquí la trama.
Puestos en situación, vamos al asunto. Pero antes, creo necesario responder a una pregunta importante que surge cuando uno se topa casualmente con este juego sin saber nada al respecto: ¿es de terror?
En mi humilde opinión, no. No es un juego de terror, aunque también te digo que este es un “no” pronunciado con la boca pequeña. Con esto quiero decir que no te esperes momentos de pánico y miedo como si esto fuera un survival horror tradicional (aunque en ocasiones se note que hay una cierta influencia de estos sobre este título). Por otro lado, muchos de sus lúgubres niveles están diseñados para dejar al jugador una sensación constante de incomodidad y angustia muy logrados. No solo a nivel de escenarios, los cuales son una verdadera maravilla a la hora de transmitir una sensación de inseguridad tras cada esquina y de nerviosismo, sino también por la variedad de enemigos y lo escabroso de los mismos, así como algunas de las historias secundarias que se esconden en cada uno de los mundos que visitamos.
Y pese a que el argumento empieza con el sonrojante recurso de “el protagonista inepto que pulsa un botón rojo”, además de mostrar ciertas lagunas o situaciones un tanto descabelladas, lo cierto es que tanto la trama principal como cada una de las subtramas que se desarrollan a lo largo del juego tienen unos toques muy interesantes, logrando que estemos atentos a lo que va sucediendo y se nos va explicando conforme se avanza.
Al fin y al cabo, este juego pretende ser un soplo de aire fresco en muchos aspectos. Empezando por sus propias mecánicas básicas. Este juego pertenece al género del shooter en tercera persona (de ambientación paranormal pero shooter al fin y al cabo), con fuertes toques de acción, pero créeme si te digo que no basta con disparar al enemigo para lograr abrirse paso en el juego, ni mucho menos. Permíteme que te explique.
Como buen policía, Lazarus cuenta con su arma de fuego reglamentaria, una pistola automática para balas de 9mm que además cuenta con un suministro ilimitado de munición, aparte que más adelante logramos hacernos con una más que respetable escopeta y hasta un lanzagranadas (con proyectiles explosivos y de humo), los cuales si se pueden quedar sin balas. Eso está muy bien para monstruos como el ravenant, que tienen un mínimo de solidez física, pero la inmensa mayoría de enemigos con los que tendremos que vernos las caras son fantasmas incorpóreos con muy mala leche, y a los cuales las balas no les hacen ni cosquillas, por lo que Lazarus necesitará de un equipamiento especial.
Por ello, al poco de empezar la aventura, se nos entrega un objeto crucial en este título: La granada espectral. Cuando el protagonista lanza esta especie de frisbe de alta tecnología a un fantasma, este se queda temporalmente anclado al mundo físico y podemos ver su nivel de resistencia. Es entonces cuando podemos agotar su energía hasta que esté suficientemente debilitado como para ser capturado por la granada espectral. Para ello debemos atacarle con varias armas especiales que vamos encontrando a lo largo del juego, como el sniper de energía, el lazo espectral, la tecnopistola, o el rifle de pulso. No obstante, todas estas armas (salvo la tecnopistola), requieren de una munición especial en forma de orbes luminosos de color azul que encontramos en diferentes puntos del juego o al atacar a los enemigos. Dichos orbes pueden ser atrapados con la granada espectral si están fuera de nuestro alcance, al igual que los orbes rojos que recuperan la salud de nuestro protagonista.
Además, nuestro protagonista cuenta con unas gafas especiales que le permiten ver ciertos elementos de origen fantasmal que escapan al ojo humano, una linterna que se acopla a su arma, y un emisor de luz ultravioleta para encontrar rastros que no se pueden ver a simple vista.
Objetos muy útiles y que no vienen nada mal, especialmente si tenemos en cuenta que, en el caso que la salud de Lazarus llega a cero, este no solo perderá la vida, sino que su alma será despedazada. Vamos, que lo matan bien muerto.
No obstante, en este juego no todo consiste en ir por ahí pegando tiros a entes ectoplásmicos con armas muy chulas, pues en algunos momentos nos encontraremos con que el paso está bloqueado y necesitaremos un poco de ayuda. Esta viene de Astral, la mujer fantasma que se fusiona con Lazarus en los sótanos del instituto Montsaye. Está fémina espiritual no solamente cuenta con un papel muy importante en la trama, sino que además le otorga al protagonista la habilidad de ver la mayoría de fantasmas. Por si esto fuera poco, Astral tiene el poder de absorber las habilidades de ciertos enemigos para usarlas en puntos clave del juego en los que puede separarse temporalmente de Lazarus. Estas secciones tienen una mecánica de puzzle dinámico que dan más variedad al juego, a la vez que nos obligan a darle un poco de marcha a las neuronas.
Dicho todo esto, admito que ahora mismo es un juego un poco difícil de mirar en lo que a gráficos se refiere, especialmente si lo comparamos con los títulos más recientes, pero tampoco es nada despreciable (la primera vez que lo jugué, alucinaba de ver como el bajo del pantalón del protagonista se quedaba empapado tras atravesar un área de agua y como se iba secando lentamente). Aparte que el diseño de niveles y monstruos me parece de lo más interesante.
En dónde el juego también pega bastante fuerte, es en el extraordinario doblaje al castellano que ofrece, aparte que los actores de doblaje están muy bien elegidos y casan de maravilla con cada personaje. Digna de mención es la banda sonora, y aunque cada tema tiende a ser un tanto machacón y repetitivo, lo cierto es que son bastante buenos, logrando dar más fuerza a la ambientación de cada nivel y mejorando aún más la atmósfera general de este título. Pero mejor te dejo unos pocos temas para que juzgues por tu cuenta.
Baoyou and mine.
www.youtube.com/watch?v=KOhKPHGX0m8&list=PLE71604571A6A2311&index=7
Weird mansion (Part I)
www.youtube.com/watch?v=MY-6G671_4Q&list=PLE71604571A6A2311&index=8
H.M.S Victoria
www.youtube.com/watch?v=3gJgewPA2CE&list=PLE71604571A6A2311&index=17
Por otro lado, este post no sería justo si me dejara en el tintero que este juego tenía un fallo de los graves: su brevedad. Si eres un jugador casual que busca un juego en el que ponerse a jugar como quien no quiere la cosa tras un largo día de trabajo, en plan “avanzo un poco y a dormir”, fantástico, porque además cuenta con un único nivel de dificultad bastante normalito. Alguna vez que otra se acaba viendo la impactante escena de Game Over, pero al poco que te pongas serio, es un título que se acaba pasando sin problemas. Por eso, si lo que buscas es un desafío, un título que ofrezca muchas horas de juego, o que incluso disponga de una buena rejugabilidad, mejor busca en otra parte porque aquí no hay nada de eso.
De hecho, Ghost Hunter solamente cuenta con una historia principal que un jugador habitual se puede ventilar perfectamente en dos o tres tardes. Nada de niveles de dificultad, ni misiones secundarias, coleccionables, o algo que alargue un poco su experiencia de juego. Nada de nada. Para colmo de males, tiende a ser bastante lineal. Lo cual me parece una verdadera lástima, porque realmente es un título que tiene verdaderos toques muy logrados, divertido, y que podría haber dado bastante más de sí.
Aún con todo esto, es bastante recomendable. Si por casualidad el destino lo pone alguna vez en tu camino, vale la pena probarlo.
Y hasta aquí llega este post.
Como recomendación de la semana, quiero presentarte nuevamente una de estas iniciativas que tanto me gustan y que se sirven de los videojuegos como medio para hacer un gran bien a quienes más lo necesitan. Me estoy refiriendo a Fundación Juegoterapia, cuya finalidad me parece más que admirable. La idea salió en 2010, cuando a su fundadora Mónica Esteban se le ocurrió darle una PlayStation a un niño ingresado por un tratamiento de quimioterapia. En un ambiente tan atemorizante como este, echar unas partidas cambió el modo en que este joven aventurero vivió su experiencia. Desde entonces, el proyecto Juegoterapia se dedican a recoger consolas y videojuegos para donarlos a los hospitales, además de recaudar donativos de socios, y voluntariado, para crear jardines, áreas de juegos, y hasta cines para que los niños con cáncer. Te dejo el link directo con todas sus actividades, proyectos, información, y modos en que se puede colaborar con su gran labor. www.juegaterapia.org/
Como siempre, te recuerdo que acostumbro a publicar nuevo contenido todos los domingos, de modo que, si nada lo impide, volvemos a vernos el próximo día 4 de octubre.
Para terminar, quisiera pedirte que, si has disfrutado el post, me sería de mucha ayuda si le dieras al botón “Me gusta” y lo compartieras en tus redes sociales, así como con tu familia y seres queridos. También decirte que puedes participar activamente en el blog a través de la caja de comentarios, ya sea dejándome tus sugerencias para la “recomendación de la semana” (si conoces algún evento o local interesante relacionado con el frikismo cerca de dónde vives), así como tus aportes para la sección de “Fechas frikis” y “Curiosidades” al margen de cualquier cosa que quieras compartir conmigo y los demás lectores. También puedes apoyar al blog mediante la aplicación “Invítame a un café” que se encuentra en la barra de widgets. Todo ello me sería de gran ayuda para seguir adelante con “tallopis-escribe.com”.
Sin más que añadir, cuídate mucho y pásalo bien.
Salud, ánimo, y éxito.
-Dedicado con cariño a T de laboratorio. Experta cazadora de fantasmas y mejor persona-