Serie de TV retro: Cosas de casa.

 — ¿He sido yo?–

  ¡Saludos, oh buena persona lectora que vives en el universo al otro lado de la pantalla!

  Se más que bienvenido/a a otro post. Adelante, pasa y acomódate. Respira hondo, quítate los zapatos si te es posible, relájate y sírvete una agradable bebida que te acompañe a lo largo de la lectura porque esto ya empieza.

  Que alegría volver a escribirte. La verdad que tenía ganas.

  En esta ocasión, me presento ante ti decidido a comentarte al respecto de las sit-coms familiares que tanto se pusieron de moda durante los ochenta y noventa. ¿Las recuerdas?.

 Actualmente es fácil encontrar muchos shows televisivos que hacen referencia en clave de humor a este formato en alguno de sus episodios y la verdad que no es de extrañar, pues en su momento establecieron todo un referente y no fueron pocas las series del mismo estilo que se produjeron.

  La fórmula tendía a ser siempre la misma: un núcleo familiar tradicional con un personaje que destacaba a nivel cómico por encima de los demás, casi siempre con una frase característica, pullas constantes, risas enlatadas, topicazos como para parar un tren y toda clase de enredos de lo más disparatados que siempre se terminaban resolviendo mediante el cariño que se tenían los personajes entre sí como medio de hacer llegar alguna moraleja al espectador. ¿Simple? Po zi. ¿Un tanto azucarado? Pues también, para qué engañarnos. Pero oye, funcionaban a las mil maravillas y quien más y quien menos tiende a recordarlas con bastante cariño por los buenos ratos que nos hacían pasar.

  De este modo encontramos algunos títulos como <<De otro mundo>>, <<El príncipe de Bel-Air>>, <<Padres forzosos>>, <<Primos lejanos>>, <<Alf>>, <<Blossom>>, <<Webster>>, <<Los problemas crecen>>… ¡la tira oiga!. Pero pocas de ellas tan conocidas como la que hoy vengo a presentarte: <<Family Matters>>, conocida en España como <<Cosas de casa>> y también como <<Todo queda en familia>> según desde dónde me estés leyendo, la cual era protagonizada por los integrantes de una típica familia norteamericana que vivían toda suerte de peripecias desde su hogar en los suburbios de Chicago.

  Permíteme que te los presente.

El clan Winslow

  –Carl Otis Winslow (Reginald VelJhonson): El patriarca de la familia y uno de los pocos personajes de este show que aparece en todos y cada uno de los capítulos de la serie. Es un esposo fiel, un abnegado padre, un amigo de verdad y un entregado sargento de policía que se toma muy en serio su trabajo. Carl es ante todo un tipo sencillo, a veces le pierde el ser un tanto temperamental y poco paciente, e incluso un tanto tacaño, pero por encima de todo es un hombre cariñoso con sus seres queridos quien además disfruta como el que más de ir a pescar, preparar alegremente una buena barbacoa en el jardín y pasarlo en grande viendo un buen partido de baloncesto por televisión. En general, es un buen tipo donde los haya.

Curiosamente, esta no es la única vez en que este actor interpreta a un policía, pues podemos verle en un papel secundario pero muy reconocido por los fans en la película <<La jungla de cristal>>, lo cual le valió a VelJhonson una breve aparición en la hilarante serie <<Brooklyn-99>> al interpretarse a sí mismo para comentar su participación en dicha producción cinematográfica, y otra vez en <<Los Cazafantasmas>>, dando vida al guarda de prisión que aparece cerca del final. De hecho, en este film se presentó al casting para el papel de Winston Zeddmore, el cuarto integrante del equipo protagonista.

  Pero esta, es otra historia.

  –Harriette (interpretada por Jo Marie Payton-France, quien fue sustituida por Judyann Elder a mediados de la última temporada): ¿He comentado ya que esta serie nació como un spin-off de otra con el mismo estilo? Pues el nexo de unión entre ambos shows es precisamente el personaje de Harriette, a la que conocimos como la sufrida ascensorista del edificio donde se encuentra la redacción del periódico Chicago Chronicle en la serie <<Primos lejanos>> y aguantando las peripecias del primo Balki Bartokomous antes de conocer más sobre ella en esta <<Cosas de casa>>. Harriette empezó su carrera profesional como policía, dónde seguramente conoció a su esposo Carl, antes de trabajar en el Chronicle, en dónde terminó siendo directiva de seguridad. Aparte de darle al callo por dinero como todo quisqui, Harriette es ante todo una persona entregada a sus seres queridos. Estricta y de carácter fuerte, si, pero también es el pegamento que mantiene unida a toda la familia Winslow.

  –Estelle (Rosetta LeNoire): Es la madre de Carl y vive en la misma casa con el resto de la familia, siendo cariñosamente conocida por todos como <<Mamá Winslow>>. De hecho, el primer episodio, <<La llegada>>, gira precisamente en torno a este personaje y su mudanza al hogar de los Winslow. Que su apariencia de dulce ancianita no te engañe, pues aunque la veas haciendo ganchillo y cocinando galletitas de vez en cuando, esta mujer entrada en años se caracteriza por tener un espíritu joven y una mente abierta que descoloca al más pintado. Tiene citas, sale a bailar, juega al tenis, toca la trompeta, entiende a las mil maravillas la jerga adolescente y no se pierde un número de la revista Rolling Stone. Ni que decir que siempre ejerce como voz de la experiencia y la razón, pero el que pueda que le siga el ritmo, porque no veas que marcha lleva la moza. ¡Cuando me jubile quiero ser como esta señora!

  –Rachel Crawford (Telma Hpkins): La hermana menor de Harriette. Se mudó a la casa Winslow tras enviudar junto a su hijo pequeño Richie (interpretado primero por Joseph Julius Wright y posteriormente por Bryton McClure). A lo largo de la primera temporada la vemos perseguir su sueño de ser escritora profesional, pero al parecer la cosa de darle a la tecla no le terminó de convencer del todo, pues a partir de la segunda temporada se pone al frente de su propio negocio al dirigir el restaurante Rachel’s Place. Tiene un amplio sentido de la moda y le encanta ejercer de tía.

  –Edward <<Eddie>> Arthur (Darius McCrary): El hijo mayor del matrimonio Winslow es el perfecto tópico de adolescente en plena edad del pavo. Le cuesta aceptar la disciplina familiar así como los consejos, su popularidad en el instituto y amigos son lo más importante para él junto con vestir a la última, no se le dan especialmente bien los estudios aunque es un destacado deportista y vive convencido de ser todo un Don Juan. Es más, muchos de los conflictos familiares se representan a través de este personaje que, por encima de todo, la verdad que es buen chaval.

  –Laura (Kellie Shanygne Williams): La hija adolescente Winslow no es muchos años menor que su hermano Eddie, aunque sus respectivos actores solo se llevan una diferencia de pocos meses en realidad. Su más grande pasión es la música y es un tanto cínica, siendo la autora de muchas de las pullas cargadas de ironía que vemos en la serie. Sin embargo es muy responsable y su carácter ácido en realidad es una fachada que oculta una fuerte brújula moral, por no decir que es de lo más inteligente y da una gran importancia a sus estudios. Combina sus clases en el instituto con  un trabajo como camarera en el restaurante de Rachel.

  –Juddy (siendo Jaimee Foxworth quien da vida a este personaje aunque en el primer capítulo fue interpretada por Valerie Jones): La menor de los tres hermanos Winslow es una niña de primaria de lo más ocurrente a la que no se le da muy bien la ortografía pero que está loca por su primo Richie. O al menos así era, pues tras el episodio 19 de la cuarta temporada, el personaje desapareció de la serie de un capítulo para otro y nunca más se supo.

  –Waldo Geraldo Faldo (Shawn Harrison): Vale, estoy haciendo un poco de trampa pues este personaje no pertenecía a la familia Winslow, pero con su inocencia y candidez me hacía tanta gracia que de ningún modo podía obviarlo a él ni a su peculiar costumbre de responder con su apellido cada vez que alguien lo llamaba. Aparte que su actor de doblaje al español, Roberto Cuenca Rodríguez (hijo) le sabía poner un acento tan exagerado como divertido que se convirtió en otra seña de identidad del personaje. En un principio conocemos al bueno de Waldo como el amigo despistado del matón del colegio al que acuden Eddie y Laura, pero con el tiempo caló tan hondo entre los seguidores de <<Cosas de Casa>>, desde que apareció por primera vez en el episodio 18 de la segunda temporada, que con el tiempo terminó siendo el mejor amigo de Eddie por encima del personaje que lo era hasta ese momento: Rodney Beckett (Randy Josselyn).

  Y bueno, hasta aquí los personajes principales de este show. Aunque tengo la impresión de que me estoy dejando a alguien.

Huracán Urkel

  Si conocías la serie, es probable que te estuvieras preguntando en que momento del post saldría a escena el personaje que la catapultó hacía el éxito.

  Llegó el momento de escribir acerca de Steve Quincy Urkel.

  Interpretado por Jaleel White, al que también pudimos ver en la película de 1990 <<Campamento Cucamonga>> y escuchar su voz al doblar en su versión original a Sonic the Hedgehog en varias de sus series animadas, lo cierto es que a este actor le faltó muy poco para no dar vida a Urkel, pues antes de presentarse al casting para <<Cosas de Casa>>, lo cierto es que White se presentó a una audición para interpretar a Rudy en <<El show de Bill Cosby>>. Como supondrás con esta sagacidad que te caracteriza, no fue seleccionado para el papel (de hecho Rudy terminó siendo un personaje femenino interpretado por la actriz Keshia Knight Pulliam) y White terminó siendo elegido para interpretar a Steve Urkel, que de entrada no estaba previsto que formara parte de la serie. De hecho, la primera aparición del personaje duró apenas unos segundos, cuando en el cuarto episodio de la serie, durante el breve sketch que precede a los créditos iniciales, Steve convence a Carl de no comerse una porción de tarta para terminar comiéndosela él. Sin embargo, tanto en los pases de prueba como por parte del público, el personaje tuvo una muy buena recepción y volveríamos a verlo brevemente en el séptimo episodio. Finalmente, en el capítulo ocho las cosas cambiarían para siempre al pronunciar por primera vez su célebre frase <<¿He sido yo?/Did I do that?>>.

  La audiencia sencillamente enloqueció ante el desparpajo del personaje, movimientos y forma de hablar, pidiendo más apariciones de Urkel. De este modo, en el episodio 12 de la primera temporada se le pudo ver por fin participando en la trama principal y desde entonces se convirtió en el personaje regular que todos conocemos, el cual no solo llegaría a ser el principal atractivo de la serie, que hasta entonces se centraba en la resolución de conflictos de los Winslow, sino a llevar <<Cosas de casa>> a un terreno mucho más cómico y del que destacaría como claro protagonista.

  Pero me estoy liando.

  ¿Quién es Steve Urkel?

  Pues ni más ni menos que el vecino adolescente de los Winslow, hijo del doctor en neurocirugía Herb Urkel y su esposa Dayane, a los que nunca se ve en pantalla. Un chaval muy bien intencionado, de gran corazón, siempre dispuesto a ayudar, amén de ser sobradamente inteligente hasta rozar la categoría de genio superdotado. Un auténtico cerebro con patas para el que no existe dato desconocido ni rama del saber que no domine, convirtiéndose de paso en el arquetipo de sabio despistado claramente desadaptado de la norma social común en relación con los demás. Vamos, un empollón de toda la vida que es y se sabe diferente.

  La cosa no tendría nada de malo sino fuera porqué, aparte de todo lo dicho, este fan de los quesos y la música para bailar polka, es un verdadero agente del caos que causa todo tipo de tronchantes desastres y accidentes allá por dónde pasa, amén de resultar pesado y sumamente irritante, entrando como Pedro por su casa en el hogar familiar de los Winslow a diario para desgracia de Carl y Eddie, a los que Steve considera sus mejores amigos, pero sobretodo de la joven Laura, de la que está locamente enamorado desde el momento que la joven Winslow le hizo tragar su propia plastilina cuando ambos estaban todavía en la guardería.

  Y la verdad que White no lo tuvo fácil para interpretar al personaje, pues con tal de conservar su apariencia infantil y frágil, el actor (que en el momento de grabar muchos de los episodios estaba atravesando la adolescencia con todos los cambios a nivel físico que ello implica) debía vigilar en extremo su aspecto y afeitarse diariamente a tan pronta edad para no mostrar el más leve rastro de vello facial además de seguir una dieta estricta con tal de no engordar ni un gramo así como abstenerse de realizar ejercicio para evitar ganar músculo, lo cual fue toda una faena para este deportista nato aficionado a echar unas canastas de vez en cuando. De hecho, durante la recta final de la serie, White vestía con ropa holgada con tal de disimular su constitución física (vamos, que se estaba poniendo cachas y no convenía para el personaje). Y ni que decir que mantener la postura característica de su personaje constantemente, aparte de su incómoda vestimenta con estos pantalones exageradamente subidos que casi le llegaban al pecho, tampoco facilitaba las cosas.

  Pero a nivel de audiencia, está claro que el resultado bien valió la pena. Aparte de que el mismo actor terminó interpretando a cerca de ocho personajes más a lo largo de toda su trayectoria en el show, incluyendo varios parientes de la familia Urkel, no me parece exagerado decir que Steve se convirtió en uno de los personajes televisivos más icónicos de toda la década de los noventa en todos los países en donde se emitió el show y alcanzando unas cotas de popularidad arrolladoras. De hecho, fue tal su impacto que el merchandising sobre este personaje, que no sobre la serie en general, ojo cuidado, llegó al punto en que camisetas, gorras y hasta muñecos no tardaron en lanzarse al mercado, así como comercializarse su propia marca de cereales y realizar varios cameos en otras series de la Warner Bros a la que pertenece <<Cosas de casa>>, como <<Meego>> (en un intento de aumentar la audiencia que no tuvo muy buen resultado), así como la ya mencionada <<Padres forzosos>> o <<Paso a paso>>, conocida como <<Los tuyos y los míos>> en España, además de protagonizar una breve aparición en la octava temporada de <<Yo y el mundo>>.

  Es más. ¿Cómo olvidar la participación de Jaleel White en el programa <<Sorpresa Sorpresa>> en España? Momento televisivo sin igual en donde el actor conoció a la actriz de doblaje que ponía la característica voz a Steve en la versión hispana, Pilar Coronado, causando la hilaridad del público. Y es que fue tal la acogida del personaje por estos lares que incluso llegó a salir parodiado en forma de muerto viviente en el cómic <<TV Heroes VS Zombies>> creado por David García Cruz, Pepe Caldelas y Jordi Pérez que la editorial Panini publicó en 2011, tantos años después de la cancelación del show, dejando patente que este personaje sigue estando en la memoria colectiva de tantos que vieron la serie.

   En definitiva, su fama no se limitó a Estados Unidos, sino que por todas partes se desató oficialmente la Urkelmanía, sin mostrar síntomas de querer detenerse.

  O al menos, no demasiado pronto.

Construyendo un hogar

Sin embargo, todo llega a su fin y el caso que nos ocupa no es excepción. Con el paso del tiempo, la dinámica general de <<Cosas de casa>> se volvió demasiado repetitiva y de nada sirvió que el show tratara de introducir temas de ciencia-ficción como robots, viajes al espacio o sueros genéticos en su última etapa para intentar aportar algo de frescura. La audiencia fue perdiendo paulatinamente el interés en la serie hasta que llegó a su irremediable cancelación. Por suerte, no sin antes dar a conocer el destino que aguardaba a sus protagonistas. Pero lo cierto es que la cosa no vino de un día para otro y la longevidad de la serie es claro indicativo del éxito que llegó a tener.

Estrenada en setiembre de 1989 en la cadena ABC norteamericana, y firmando contrato con el canal CBS en sus últimos episodios, <<Cosas de casa>> alcanzó la nada desdeñable cantidad de 215 capítulos repartidos a lo largo de nueve temporadas antes de finalizar en julio de 1998, lo cual es un caso poco común en lo que se refiere a series de televisión el mantenerse tantos años en antena y seguro que esto fue algo que pilló por sorpresa a los creadores de la serie: el productor William Bickley y el guionista Michael Warren, del que se dice que se inspiró en un amigo cercano llamado Steve Erkel para crear al conocido personaje de Steve Urkel. Y aunque ya han pasado más de veinticinco años desde que los Winslow abandonaron el estudio de Warner Bros en Los Ángeles donde se rodaba cada episodio, y la casa que servia de exteriores en el 1516 de West Wrightwood Avenue de Chicago dejó de usarse para este fin, está claro que se quedó en nuestros recuerdos por méritos propios. 

–Conclusionando: Desde que disfrutamos esta serie en la sobremesa de la cadena Antena 3 en la década de los noventa, el mundo ha dado muchas vueltas y los cambios han sido tan notables y naturales como inevitables. El modo en que vivimos y sentimos nuestro entorno ha cambiado tanto como este mismo. Los valores son distintos, el modo en que pensamos es diferente y hasta el concepto de familia contemporáneo ha cambiado, por lo que sería impensable que un show como este se emitiera tal cual hoy en día sencillamente porque no funcionaría al haberse quedado obsoleto su estilo de sit-com familiar. Al fin y al cabo, <<Cosas de casa>>, era un claro fruto de su tiempo que debe ser entendido en el contexto de los años en que fue emitida.

Dicho de otra manera, este show televisivo ha envejecido regular y actualmente le costaría mucho conectar con el público por tratarse de algo demasiado tradicional. Lo cual imagino que es la razón por la que no se encuentra disponible en ninguna plataforma de streaming ni tampoco se lleva a cabo reposición alguna al momento de escribir estas líneas. O al menos que yo sepa.

Sin embargo, al ver de nuevo algunos capítulos con tal de documentarme adecuadamente para escribirte esto, admito que he disfrutado con el sentido del humor tan propio de su época del que hacía gala este show, así como su buen rollo a la hora de resolver los distintos conflictos que afrontaban los personajes al tratar de resolver sus diferencias o afrontar las delirantes situaciones en que se veían metidos. Y si ha conseguido dejarnos tan buen recuerdo a tantos que la vimos en su momento, pues, ¿Qué puedo decir? Está claro que algo hicieron bien, y mucho.

Con los Winslow, Waldo y Urkel nos reímos a carcajadas, pero también reflexionábamos al respecto de la relación que manteníamos con nuestros seres queridos más cercanos, e incluso nos tocaban la fibra sensible en algún momento puntual que requería de tener una caja de pañuelos cerca. En definitiva, nos hacía entrar en contacto con el lado más humano de cada uno.

Y solo por esto, que no es poco, creo que ya valió la pena disfrutarla.

  ¿Pero qué opinas tu al respecto? ¿Llegaste a ver la serie? ¿Recuerdas algún capítulo en especial? Como siempre, ya sabes que la caja de comentarios está a tu entera disposición para que compartas lo que quieras al respecto del viaje interdimensional que acabamos de realizar. Esto y que me encanta leerte, así que no te cortes.

Cómo Recomendación Especial, me permito recordaros a los que estéis en Barcelona y alrededores que ya están disponibles las entradas para el Manga 2023, que este año viene bastante potente. No solo estará bien repleto de stands con merchandising de este que da gusto tener entre las manos, sino que habrá talleres, show de cosplay y varias actividades de lo más interesante como el espacio Japan Experience.

El evento tendrá lugar del 7 al 10 de diciembre en la Feria Gran Vía de Barcelona. Por lo que si te interesa, te aconsejo que te des prisa en pillar entradas porque no es nada raro que estas se agoten a medida que se acerca la fecha señalada. Para facilitarte las cosas, puedes conseguir tus pases y consultar las distintas actividades en este link.

Como Recomendación de la Semana, quería hablaros nuevamente acerca de una de estas iniciativas solidarias que tanto me gustan, y que vienen a señalar que el frikismo no es incompatible (ni mucho menos) con realizar buenas obras que benefician a quienes más lo necesitan. Me estoy refiriendo a VIDEOJUEGOSPORALIMENTOS.ORG, una asociación sin ánimo de lucro que cambia videojuegos y periféricos a cambio de alimentos no perecederos para repartir entre las familias en riesgo de pobreza o exclusión social. Nada de dinero. Solo kilos de alimentos y te llevas un juego para casa, además de contribuir a una noble causa. ¿Qué más se puede pedir? En su web podréis encontrar una amplia descripción de su actividad así como su presencia en próximos eventos para que puedas ir a hacerles una visita.

De nuevo, quiero recordarte que tú eres la otra mitad de este blog, y sin ti no existiría Tallopis-escribe. ¡GRACIAS POR ESTAR AL OTRO LADO DE LA PANTALLA!

También quiero mandar un AGRADECIMIENTO ESPECIAL a todas las buenas gentes lectoras de bien que colaboran con el blog a través de la CAFETERÍA DE TALLOPIS-ESCRIBE, comprando mi libro de relatos cortos de ciencia-ficción <<Los Otros Tú>> o mi nueva novela <<Wae’hazu: El libro de Niel>>. ¡¡Mil gracias por vuestro apoyo y ayuda en lograr que esta bitácora salga adelante!! Todo lo aportado servirá para sufragar los costes del blog, invertir en mejoras, novedades, y nuevos proyectos en los que estoy trabajando. 

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  Ánimo, salud, éxito y un abrazo bien grande.