A finales de octubre del 2019, pocos meses antes de que llegara el primer estado de alarma y confinamiento a causa del covid-19, tuve la ocasión de visitar una feria que me cautivaría por completo: la Euro Steam Con de Barcelona, en el Centre Cívic Cotxeres de Sants.
Lo cierto es que la estética fantástica/retrofuturista del steampunk me llama poderosamente la atención. No solo por lo interesante de este subgénero literario, sino por todo lo que le rodea: su estética, la ambientación, lo bien que casa su mezcla de conceptos… ¡prácticamente todo! Y es que a nivel de ucronías, en mi humilde opinión, es una de las más posibilidades ofrece a nivel de narrativa.
De modo que, como podréis imaginar con esta perspicacia que os caracteriza, oh buenas gentes lectoras, me sentía como pez en el agua en este lugar. Y aunque no fue en esta ocasión en que adquirí mi sombrero de copa marrón y mis gafas de soldador con que siempre me veis retratado (esa es otra historia), lo cierto es que lo pasé en grande viendo el concurso de cosplay que se llevó a cabo sobre el escenario (¡como se lo curran algunos!), charlando con asistentes de más experiencia en este mundillo, y visitando los distintos stands con toda clase de interesantes objetos a la venta, tanto en lo que se refiere a indumentaria, como impresionantes complementos, u objetos decorativos.
Fue precisamente en uno de estos stands en medio de aquel festival, que unía la época victoriana con máquinas de vapor capaces de grandes prodigios e incluso algo de magia, en dónde conocí el arte del señor Pau Gámez… y al propio Pau Gámez: un artista de lo más polifacético que hace trabajos de ilustración, 3D para videojuegos, arte tradicional, y cómics, entre los que vale la pena destacar títulos muy interesantes como StandBy o Historias Efímeras. A continuación te dejo varios links directos para que puedas conocerle tanto a él como sus distintas obras:
Sin embargo, y a efectos de este post, quiero resaltar especialmente su divertidísimo trabajo Cosas de gatos, en dónde narra sus peripecias y aventuras que vive día a día gracias a su gata Mus. Decir que se trata de un cómic hilarante, es poco. Y aunque no es necesario tener o haber tenido gato para poder disfrutar de estas geniales viñetas plagadas de humor, aquellos de vosotros que sepáis lo que es convivir con uno o varios de estos animalitos, lo disfrutaréis todavía más.
De hecho, tras este encuentro con tal artista (que encima resultó ser un tipo muy majo), me terminé llevando el mencionado volumen de historietas y una lámina impresionante. Además, atención a estos guiños a la saga de videojuegos Portal y al manga/anime Death Note.
Pero entrando ya en materia, quiero resaltar este hecho en concreto: un cómic basado en las peripecias del autor con su propio gato. De entrada parece que el tema no da para mucho, ¿verdad?, es decir, ¿que hace un gato que sea tan interesante como para que varios dibujantes decidan hacer un cómic entero basado en las experiencias que aporta tener uno como mascota? ¡Pues al parecer muchísimo! Pues no hay pocos autores de cómic que han creado geniales personajes e hilarantes viñetas durante años a partir de este concepto. Por poner algunos ejemplos, tenemos al famoso Garfield de Jim Davies, el Simon’s Cat de Simon Tofield, o Catsu the Cat de Darja Tokranova.
Pero el gato del que yo quiero hablaros es otro.
Como presentación, sirva la siguiente intro a su serie animada, que durante la infancia de más de uno de nosotros servía para anunciarnos que estábamos a punto de pasarlo en grande con las aventuras del personaje que en España conocimos como El Gato Isidoro.
En esta mítica intro, podías escuchar el pegadizo tema principal de la serie (llevo toda la semana tarareándolo sin darme cuenta ¡lo juro!), el cual fue interpretado por la cantante Carmen Carreter. Puede que este nombre no te suene a bote pronto, pero muy seguramente has escuchado su voz alguna vez, pues esta buena señora fue la responsable de interpretar los temas principales de series infantiles muy conocidas de nuestras infancias como Los Diminutos, Los Fruitis, o Los Aurones, además de doblar a personajes de películas animadas como Hércules, Anastasia, o El jorobado de Notre Dame entre otras.
Este fue solo uno más de los motivos por el cual esta serie se hiciera tan popular en España durante la segunda mitad de los ochenta. Y es que Isidoro, también conocido como Pícaro según desde dónde me estés leyendo, o bien por su nombre original Heatchcliff, fue una serie que tuvo un gran éxito en nuestro país. Razón por la que salió a la venta una gran cantidad de merchandising relacionado con las aventuras de este personaje, incluyendo peluches, pequeñas figuras que actualmente son objeto de colección, promociones, y por supuesto su respectivo álbum de cromos.
¿Pero de dónde sale esta serie de animación? Para responder a esta pregunta adecuadamente, debo hablarte del autor cuyos cómics dieron vida a este personaje por primera vez. Me estoy refiriendo al señor George Gately Gallagher (diciembre de 1928–Queens Village de Nueva York – Setiembre de 2001 en New Jersey), que fue mayormente conocido con el nombre de Geroge Gately, y que solía firmar muchos de sus trabajos como Geo’Gately.
Al parecer, Gately venía de una familia muy aficionada a los cómics y distintas expresiones de arte gráfico. De echo, su hermano mayor John Gately fue conocido con el sobrenombre de Gallagher y ganó varios premios como dibujante de cómics, incluyendo el National Cartoonist Society Gag Cartoon en 1957 y 1971 por su trabajo en diferentes revistas como 1000 Jokes Magazine o el Saturday Evening Post, por lo que no es de extrañar que George sintiera el amor al dibujo desde muy pequeño, y aunque también se planteó seriamente desarrollar una carrera como músico, finalmente decidió decantarse por el dibujo. Sin embargo, después de terminar sus estudios de arte en el Pratt Institute de Brooklyn, solo pudo encontrar trabajo para una agencia de publicidad en la que estuvo durante 11 años, esperando la oportunidad de vender su primer trabajo en una revista de cómics… lo cual no ocurrió hasta 1957. Y aunque esto fue un comienzo, no fue suficiente para poder empezar a dedicarse a ello.
Finalmente, en 1964 empezó a publicar su primer personaje regular en unos pocos periódicos de la época. Me estoy refiriendo a Hapless Harry, un individuo bonachón y regordete que siempre vestía con unos curiosos pantalones a cuadros, y al que solían ocurrirle toda una serie de particulares desgracias, fruto de su implacable mala suerte e ingenuidad. Lo cierto es que la cosa le fue bastante bien, y en 1967 sacó su segunda tira, destinada a un público un poco más adulto, que recibió el nombre de Hippy (que pese a su humor bastante blanco en comparación con los estándares actuales, prefiero no publicar en este post por si acaso, pues se supone que estoy escribiéndote sobre inocentes dibujos animados ochenteros).
Pero seguía sin ser suficiente. De modo que el éxito seguía resistiéndose a llegar a la vida de George.
Sin embargo, esto cambió en el año 1973 con la llegada de su más famosa creación: Heatchcliff. Un gato anaranjado con rayas negras que no mostraba ningún diálogo, pues solo los humanos de su entorno tenían el don de la palabra. Sin embargo, desde el primer momento mostraba este carácter tan especial que más tarde mostraría en la serie animada, así como un agudo sentido del humor un tanto cínico que a veces incluso incluía críticas a la sociedad y la política (al fin y al cabo, era una tira cómica de periódico).
Pese a ser de físico regordete y que muchas de sus travesuras se basaban en robar comida (como leche o pescado), Heatchcliff/Isidoro es un personaje muy activo y aventurero, incluso bastante gamberro, y que vivía para meterse constantemente en líos, o bien hacer la vida imposible a los perros del barrio. Además, solía es bastante astuto y mostrar una actitud muy arrogante, casi como un macarrilla de barrio que trata de ser duro. Sin embargo, aunque pueda parecer un personaje conflictivo, o un villano protagonista, lo cierto es que con sus amos, amigos, y seres queridos mostraba una gran lealtad, ayudándoles siempre que estuvieran en apuros, y con un gran sentido del honor que le llevaba a cumplir siempre su palabra. Incluso podía mostrar arrepentimiento o romanticismo cuando era necesario.
Con su llegada, no solo la mala suerte de este autor se truncó para siempre, sino que había nacido una estrella.
Cada día aparecía una viñeta de Heatchcliff/Isidoro publicado en varios periódicos de Estados Unidos de los que no he podido encontrar ningún ejemplo, así que de nuevo recurso a la sabiduría de todos vosotros, oh buenas gentes, si me podéis echar una mano con esto para completar el post. Sin embargo, en los domingos se publicaba una pequeña tira cómica en color de varias viñetas que recibía el nombre de Sundays with Heatchcliff (Domingos con Isidoro/Pícaro), y cuya última viñeta recibía el nombre de Kitty’s Corner (Rincón gatuno), la cual se dedicaba a recoger historias enviadas por los lectores del periódico y en dónde narraban las peripecias de su mascotas felinas.
Fue tal el éxito del personaje, que pronto George Gately necesitó refuerzos para poder cubrir la demanda existente. A este llamado de socorro respondieron los que se convertirían en compañeros de George durante bastante tiempo. Me estoy refiriendo a Bob Laughlin (creador de Kitz’n Katz y Monte Hale) que se encargó del entintado de las viñetas para Heatchcliff. Según varias fuentes, al poco tiempo se unió al equipo el hermano de Bob: John Laughlin, del cual no he podido encontrar mucho al respecto. Sea como sea, los tres formaron un gran equipo que con el tiempo llegarían a ir más allá de los periódicos, pues en 1985 empezó a publicarse una colección de cómics con más de cincuenta números lanzada por Star Comics (perteneciente a Marvel Cómics… poca broma con esto), los cuales también lanzarían una nueva tirada de material inedito acompañado de otro ya publicado anteriormente pero reescrito, llamada Heatchcliff’s Fun House que vería la luz en 1987.
Vamos, que este audaz felino empezó a gozar de una popularidad más que respetable.
Y es que a raíz de la gran popularidad que cosechó el personaje, no tardaría en llevarse a cabo una serie animada basada en las aventuras de este gato tan gamberrete y buen corazón… ¡pero no la que conocimos aquí! Este primer show animado, que nunca llegó a España, empezó a emitirse en 1980 por la cadena ABC y fue creado por Ruby-Spears Productions, mostrando las aventuras de Heatchcliff y un segundo segmento protagonizado por DingBat: El perro vampiro en su primera temporada, mientras que más adelante este segundo segmento sería protagonizado por el personaje de Marmaduke (personaje muy popular en Estados Unidos y que originalmente fue creado por el dibujante Brad Anderson).
Intro de Heatchcliff & Dingbat show.
Intro de Heatchcliff & Marmaduke.
Finalmente, en 1984, y ahora sí que sí, empezó a emitirse la serie que conocimos como El Gato Isidoro. Producida por DiC, con un total de 86 episodios repartidos en dos pedazo de temporadas y emitida por primera vez en setiembre de 1984 en el canal Nickelodeon, este show debutó con el nombre original de Heatchcliff and the Catillac Cats. Al igual que en la primera aparición animada del orondo gatito, esta serie mostraría el formato de dos segmentos diferenciados.
En el primero de ellos, veríamos las aventuras de Isidoro y los demás personajes que le acompañaban en sus aventuras cotidiadas, como su novia Sonia, o Sonja en su versión en inglés, una gata un tanto pijilla de la cual Isidoro estaba profundamente enamorado y por la cual bebía todos los vientos. Luego había otros como el perro Brutus que tanto disfrutaba de atormentar, y la familia humana de la cual era la mascota, que estaba compuesta por el niño Bruno (llamado Iggy en su versión original) y la Abuela, los cuales parecían vivir ajenos a las gamberradas del gato. Mientras que el tercer humano, el Abuelo o Mr.Nutmeg, tenía al protagonista de esta serie más calado que los demás y no se llevaba muy bien con él que digamos, por lo que constantemente trataba en vano de convencer al resto de la familia sobre la verdadera naturaleza de su mascota pese a que Isidoro le salvó de varios peligros en numerosas ocasiones (como el capítulo en que se descubre que Abuelo es sonámbulo). Ocasionalmente también aparecía Marcy, la mejor amiga de Bruno, y a la que le encantaba vestir a Isidoro como un bebé para pasearlo en su cochecito de juguete.
Por otro lado, el segundo segmento de la serie fue creado por Bruno Bianchi en colaboración con Jean Chalopin, y era llamado Los Gatos Cadillac. Esta segunda mitad de cada capítulo tenía como protagonista a Riff Raff, un gato callejero que lideraba una banda y que se pasea por su propio barrio con andares terrenales, siempre ataviado con su fiel gorra blanca además de una bufanda a juego y un bastón para parecer más elegante en un constante esfuerzo de imitar el estilo de vida de los gatos que viven con familias humanas ricas. Este peculiar personaje vivía en un vertedero que en realidad era todo un hogar en su interior, con salidas secretas, trampillas, y un fabuloso automóvil Cadillac transformable que tan pronto podía convertirse en un vehículo acuático como una caravana. En sus aventuras, Riff Raff estaba frecuentemente acompañado de su novia Cleo, así como su pandilla de amigos/esbirros que nosotros conocimos como Héctor (el segundo al mando y con un marcado acento neoyorquino en su versión original), el patinador Federico (llamado Wordsworth en su país de orígen), y Mungo, un gato extremadamente fuerte de carácter bonachón.
Este show animado fue todo un boom que pegó bastante fuerte. Tanto es así, que en enero de 1986 se estrenó la película de Isidoro/Heatchcliff, la cual realmente era un conjunto de capítulos. Recuerdo que era habitual que esta película se emitiera por la primera cadena de TVE durante las épocas navideñas o algún sábado por la tarde.
Como detalle, no puedo dejar de comentar que en el doblaje original, la voz de Isidoro fue realizada por el mítico Mel Blanc, famoso por ser el doblador de la mayoría de personajes clásicos de la Warner Bros, como Bugs Bunny, Elmer Gruñón, Speedy Gonzalez, o mi queridísimo Diablo de Tasmania. De modo que Heatchcliff fue uno de los últimos personajes animados a los que puso voz este legendario doblador antes de su muerte en 1989.
Finalmente, a modo de curiosidad, te dejo la intro original de la serie, la cual cuenta con tema musical creado por Haim Saban y Shuki Levi. A ver que te parece:
Heatchcliff intro.
¿Viste alguna vez la serie o leíste sus cómics? ¿que te pareció? Me encantaría que me pudieras dejar tu impresión sobre estos dibujos o alguna historia que tengas al respecto, pues ya sabéis que disfruto mucho leyendo vuestros comentarios. Por mi parte, la verdad es que recuerdo haber disfrutado enormemente de esta serie cuando era niño, pues me parecía muy divertida, aparte que su protagonista no solo tenía un equilibrio muy logrado entre ser un pícaro y el tener buen fondo, sino que además contaba con un carisma tremendo.
Y hasta aquí llega este post.
No podía faltar la recomendación de la semana, en la que repiten las buenas gentes de “Videojuegos sin fronteras”, la cual aún no ha sido del todo traducida a nuestro idioma, pero que en su versión española también incluye un link directo a la plataforma original en inglés, la cual recoge toda una serie de geniales iniciativas con las que hacer un mundo mejor gracias a medios como los videojuegos y la animación. Entre sus actuales proyectos he visto campañas contra el analfabetismo, en beneficio del desarrollo sostenible, recaudación para la investigación del covid-19, y mucho más.
Si estás interesado en sus proyectos, en la misma web se detallan los modos en que se puede colaborar en sus diversas causas, y la verdad es que vale la pena echarle un vistazo.
De nuevo, quiero recordarte que tú eres la otra mitad de este blog, y sin ti no existiría Tallopis-escribe. ¡Gracias por estar ahí!
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Sin más que añadir, volvemos a vernos el próximo domingo 30 de mayo. Te deseo feliz semana, cuídate mucho y pásalo bien.
Salud, ánimo, y éxito.
El gato animado con mas flow de la historia. Siempre fuimos muy fans de esta grandiosa serie, sobre todo de ese enorme opening que nos hizo (y hace) tararear su canción principal.
Como bien dices este gato gamberrete nos hizo pasar muy buenos momentos tanto al visualizar sus espisodios, algunode sus comics y esa película recopilatoria que dices que tuvimos la suerte de tener en formato VHS.
Además y gracias a una de esas tombolas de feria pudimos tener un peluche de este personaje que nos acompañó en nuestro cuarto durante bastante parte de nuestra infancia.
Como siempre, nos vamos a quedar cortos de elogios hacia tus post al abrir ese tarro que destapa nuestra nostalgia al leer cada uno de ellos al disfrutar una vez más de estas series que tantos buenos ratos nos ofrecieron.
Un abrazote, crack!!!
Nos leemos en el siguiente.
¡¡Hola Presstartcook!!
Como siempre, un grandísimo placer y honor el verte de nuevo por aquí con tus geniales comentarios. ¡Me encanta! 😀
Desde luego que la intro de esta serie era pegadiza a más no poder (cuando digo que durante toda la semana he estado tarareándola, no bromeo XD), y que de risas nos llegamos a hacer con sus aventuras. Recuerdo especialmente este episodio en que Abuelo resulta ser sonámbulo e Isidoro trata de salvarle del peligro en todo momento, con hilarante resultado XD. O cuando este gato tan gamberrete se asocia temporalmente con una langosta mientras va en búsqueda de una mascota para él mismo. Mientras que la película la tengo muy presente de verla de niño, especialmente en periodo de vacaciones navideñas.
Los peluches fueron míticos y muy apreciados :D. Yo no llegué a tener ninguno, pero me parece una maravilla que me comentéis el haber tenido uno de ellos. Y si encima me dices que lo lograste gracias a una de estas míticas ferias, pues más que más :D.
Los elogios se quedan cortos, si, pero para ti. No solo por tus geniales comentarios y el placer de poder charlar contigo a través de estos comentarios, sino por la gran persona que eres y este pedazo de blog (presstartcook.wordpress.com para quien todavía no lo conozca) que llevas.
Un abrazo bien grande 😀
La verdad, un personaje completamente desconocido para mí, pero sí que tiene el espíritu que me retrotrae a la época de “Top Cat” o “Don Gato” por su humor gamberro y familiar.
Recuerdo que cuando era niño TVE retransmitía, a través de la televisión publica de Uruguay, los refritos de sus series animadas por la mañana para el deleite del público infantil. Gracias a esta colaboración, siempre estrecha de los dos países, pude disfrutar de muchísimas series animadas que reconozco sin esfuerzo cuando las compartís en estas latitudes. Es una lástima que este personaje no llegara a mis ojos en ese entonces, y tal vez porque me decantaba más por otras series, no lo sé a ciencia cierta, como The Adventures of Teddy Ruxpin o directamente Thunder Cats.
Un artículo genial, como siempre querido amigo. Siempre con tu toque sincero y al mismo tiempo alucinante. Me encanta que siempre cuentes alguna anécdota personal y te internes en la vida de los creadores del material que con tanto lujo nos compartes.
¡Un saludo muy grande! Y tanto mi café y yo mismo, tenemos ganas de que sea el domingo próximo.
¡¡Hola 99cyborg!!
Dios, todo un placer tenerte por aquí. Pero antes de entrar en materia y responderte como es debido, tengo que decirlo… ¡¡tu bitácora «mecanicatortuga.blogspot.com» me parece dinamita de la buena!! Me pasé hace poco para leer alguno de tus geniales posts, como este tan currado que tienes dedicado a «Kick-Ass», y me pareció una pasada.
Dicho esto, me hace mucha ilusión saber que gracias a esta colaboración televisiva entre países pudieras disfrutar de estas series animadas que me comentas. De echo, me has desbloqueado un recuerdo muy especial tras nombrar esta serie de «The Adventures of Teddy Ruxpin» que veía de pequeño, y que acudió a mi mente tras leerte. ¡Gracias de corazón!. Y bueno, ¿Qué decir sobre esta maravillosa «Thunder Cats», con este Lion-o y su Espada del Augurio para ver mas allá de lo evidente… ¡una de las grandes series de nuestra infancia! :D. No descarto el traerla al blog un día de estos.
En cuanto a este Isidoro, lo cierto es que tenía un punto gamberrete que, curiosamente, lograba que empatizaras con él en cada una de sus aventuras. Los cómics dominicales tenían su gracia, pero es que la serie que contaba con el segmento añadido de «Los gatos Cadillac» era buenísima. Y por supuesto recuerdo haber visto algún episodio de la grandísima «Don Gato» (ese oficial Matute XDXD). Todo un personaje de lo más entrañable 😀
Querido 99cyborg, es todo un placer que te pases de visita por mi humilde blog, y siempre eres más que bienvenido. Muchísimas gracias por tu comentario, pero sobre todo, por la oportunidad de poder hablar contigo sobre estas series animadas que tanto disfrutamos.
Disfruta de este café, y cuídate mucho 😀
Una maravilla que escribas sobre Isidoro la de cosas que se aprende y se recuerda, completo y muy acertado. Hay algún párrafo que es la perfección, el del gato regordete me ha encantado lo acertadísimo que pones todo. Tiene tu completo sello al escribir escribes con cariño y cercanía, eso es tu fuerte, y lo notamos la gente que recordamos o tenemos con cariño muy buenos recuerdos.
A mi me encantaba, su carácter era perfecto, gamberro por un lado y leal con sus amigos, romántico cuando tenia que ser, y muy divertido siempre. Era un éxito seguro en aquella época. Yo tenia un peluche que me hizo mucha ilusión que aun conservo y varios muñecos.
La de cosas ademas que he aprendido que no sabia, nunca me dio por investigar y lo cuentas genial así que un gusto.
La verdad es que se hizo bastante famoso el gato, sobretodo su pegadiza música que es escucharla de nuevo y que no se te vaya de la cabeza.
Al igual que la letra que perdurara en mi para siempre.
Ya te dije que la lectura me cuesta, pero cuando encuentro un rato tranquilo y empiezo un articulo tuyo, necesito terminarlo si o si.
Un abrazo compa!
¡¡Excelentisimos MecaCoop!!
Un placer y un honor contar con vuestra visita compacracks 😀 (me encanta este palabro vuestro, con permiso os lo tomo prestado ^_^).
¡¡Sois más que bienvenidos!! Por cierto, que bien lo paso con vuestras aventuras vikingas en este fabuloso canal YT que lleváis.
De verdad que me dan ganas de enmarcar tu comentario, vas a conseguir que me sonroje… ¡muchísimas gracias por vuestras palabras!
Y hablando de Isidoro, a cada uno le puede gustar más o menos y todo ello es perfectamente respetable, pero no es de extrañar que este personaje se hiciera tan popular, pues en verdad tenía este punto de equilibrio exacto entre ser un pícaro sinvergüenza de buen corazón y principios. Además de lo mucho que nos hacía reír con sus aventuras.
En cuanto a todo lo dicho en el blog, lo cierto es que antes de empezar a documentarme para este post no conocía ni la mitad y en varios sentidos he sido el primer sorprendido al aprender tanto sobre los entresijos que rodean a este personaje y sus orígenes. Lo del segmento dedicado a «Dingbat» en este primer show animado, o los primeros personajes de su creador George Gately (si buscas alguna viñeta de Hippy o alguna más de Hapless Harry te sorprenderás :O).
Por favor, no te lo tomes a mal ni mucho menos, ni tampoco quiero llevarte la contraria, pero como ya te comenté en algunas de estas maravillosas charlas que he tenido contigo, creo que no hay malos lectores, sino simplemente personas que no han encontrado un texto (o formato) que les motive lo suficiente. De modo que me parece todo un honor que me llena de alegría que me digas sentirte así con mis humildes escritos: ¡gracias de corazón!
Espero poder pasarme por vuestro canal muy pronto. Hasta entonces, cuidaros mucho y pasadlo en grande 😀